La importancia de la limpieza de lengua y cómo hacerlo correctamente
La lengua es un músculo que nos permite realizar funciones vitales como masticar, tragar, sentir el sabor de los alimentos y hablar; sin embargo, a menudo es el gran olvidado de la limpieza bucodental.
Su particular anatomía, compuesta por surcos y fisuras, la convierte en un foco permanente de acumulación de biofilm bucal. Cuando la lengua no se limpia, se forma una característica capa de color blanco en el tercio posterior de la misma, la cual es la responsable del mal aliento. Por lo tanto, la limpieza de la lengua es muy importante para evitar tanto el mal aliento como la caries, la xerostomía y la enfermedad periodontal.
¿Cómo sé si mi lengua está sana?
El aspecto sano de una lengua es de color rosa y no blanco. Por el contrario, si la lengua tiene una capa blanquecina o amarillenta que cubre parte de su dorso, significa que no está limpia.
En la mayoría de los casos, la lengua blanca es sinónimo de falta de higiene. A su vez, esto conlleva a que se acumulen bacterias y guarda relación directa con el mal aliento.
Aunque el color blanquecino se suele asociar a una lengua con bacterias, en ocasiones puede ser síntoma de alguna afección.
Diversas enfermedades comunes de la lengua como la candidiasis oral, la leucoplasia o el liquen plano oral también pueden originar este cambio de color.
Para saber distinguir si tenemos uno de estos problemas basta con limpiar la lengua blanca y, si los restos de comida y bacterias se retiran, volviendo la lengua a adquirir su tonalidad habitual, no deberíamos preocuparnos.
En caso de que los síntomas persistan, es decir, que a pesar de la limpieza continúe el color blanquecino, es aconsejable acudir a una clínica dental de confianza para obtener un diagnóstico fiable.
¿Cómo limpiar la lengua correctamente?
Para recuperar el tono rosado de lengua se deben de poner en práctica unas sencillas técnicas de limpieza con la ayuda de productos elaborados para este fin:
- Limpiador o raspador lingual. Es un instrumento diseñado específicamente para eliminar la suciedad de la parte posterior de la lengua. Su modo de empleo consiste en raspar suavemente la parte más profunda de la lengua hacia el exterior en varias ocasiones sin olvidar los lados. Basta con enjuagar con agua al menos dos veces.
- Cepillos con limpiador lingual. Los cepillos de dientes en ocasiones tienen en la parte contraria a la cabeza un material rugoso para limpiar la lengua. T
¿Se puede emplear el cepillo de dientes para limpiar la lengua?
No es recomendable emplear las cerdas de un cepillo tradicional para este fin.
El cepillo manual no ofrece los mismos resultados que los limpiadores linguales. Esto se debe a que las cerdas están pensadas para limpiar una superficie dura como el diente, y no un músculo como la lengua.
¿Cuándo debo utilizar el raspador lingual?
La higiene de la lengua debe ser una tarea rutinaria y por ello es conveniente usar el raspador al menos una vez al día, de preferencia antes de irnos a dormir.
Debido a que por la noche segregamos una menor cantidad de saliva, que evita la acumulación de placa bacteriana, es el cepillado más importante.
Una vez que hemos lavado los dientes y pasado el hilo dental, es momento de usar el raspador lingual.
Se recomienda utilizar un enguaje bucal tras la limpieza lingual, pues así se garantizamos una rutina completa de higiene antes de irnos a dormir.
Mantener una buena higiene de la lengua es sencillo y rápido. Eliminar diariamente las bacterias que se acumulan en la lengua evitará problemas bucodentales futuros y reducirá la posibilidad de desarrollar mal aliento.
Nota aclaratoria: la información proporcionada en este blog es de carácter informativo y no debe tomarse como medio de diagnóstico o tratamiento.